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Sistema de Indicadores sobre Desertificación para la Europa Mediterránea |
g Indicadores utilizados a escala nacional En el marco de los Programas de Acción Nacional, los Puntos Focales de la subregión del Anexo IV utilizaron 3 o 4 índices que fueron cartografiados a escala nacional para poder estimar cuáles eran las áreas amenazadas por la desertificación y hasta qué punto estaban afectadas. Muchos de estos Puntos Focales procedieron también a cartografiar a escala regional un conjunto mayor de indicadores. La mayor parte de los índices e indicadores utilizados se describen en DIS4ME (existen enlaces hacia la base de datos de indicadores), en ocasiones con una denominación ligeramente distinta.
Fuente: Lúcio do Rosário (2004) Indicadores de Desertificação para Portugal Continental. Direcção-Geral dos Recursos Florestais. http://www.dgrf.min-agricultura.pt
g Indicadores sobre desertificación obtenidos gracias a la teledetección Se ha examinado un amplio conjunto de indicadores potenciales sobre desertificación basados en la teledetección, aunque el trabajo se ha centrado en aquellos que se refieren a cuestiones y temas identificados por los actores locales. La mayor parte de los indicadores basados en la teledetección están relacionados con la cobertura vegetal y sus cambios, aunque también pueden tratar de cuestiones tales como la expansión urbanística descontrolada o el contenido en materia orgánica de la capa arable del suelo. Se han preferido los indicadores que pueden ser estudiados utilizando la teledetección casi como única herramienta, aquellos cuyo modelo utiliza la teledetección como componente central o aquellos para los cuales se prevé un aumento de la importancia de la teledetección en un futuro cercano. Un criterio suplementario fue el hecho de que la cuestión estudiada por el indicador fuera abordada por alguna de las principales iniciativas europeas, como es el caso de la expansión urbanística descontrolada o los incendios forestales. La tabla
siguiente muestra los indicadores para los cuales la
contribución de la teledetección presenta un mayor
potencial. Aunque la lista es corta, se debe destacar que existen otras
cuestiones e indicadores que pueden beneficiarse del aporte de la
teledetección (p. ej. el pastoreo, el abandono de la tierra,
etc.), en particular si se la combina con modelos geomáticos,
económicos y socioeconómicos (como se muestra en los
proyectos GeoRange y LADAMER). Los tres últimos indicadores han
sido añadidos porque los Puntos Focales nacionales los
consideraron relevantes para importantes áreas piloto de los
países del Anexo IV. Indicadores de DESERTLINKS para los cuales la
aplicación de la teledetección presenta un mayor potencial
La
teledetección ha sido utilizada para investigar de qué
forma y hasta qué punto los cambios en los flujos de
energía y agua en la interfase entre la superficie del suelo y
la atmósfera están relacionados con las supuestas
modificaciones en la influencia del clima sobre los procesos de
desertificación. Se han desarrollado avanzadas técnicas
que permiten obtener de forma precisa variables radiométricas
“primarias” estandarizadas (p. ej. reflectancia espectral,
albedo, temperatura superficial, emisividad, etc.) y analizar el
comportamiento a lo largo del tiempo de esas variables en
términos de intercambio de energía, momento o masa entre
la tierra y la atmósfera [1] [2]. En vez de utilizar un enfoque
“climático”, DESERTLINKS pretende más bien
identificar los cambios que se producen en las condiciones
físicas de la superficie de la tierra desde el punto de vista
del estado de la cobertura vegetal y del suelo. Este enfoque requiere
también la capacidad de transformar correctamente las
radiaciones registradas por los detectores remotos en variables
físicas primarias (p. ej. reflectancia o temperatura superficial
del suelo). Una vez que se ha adquirido esta capacidad, la
información acerca del estado físico de la superficie de
la tierra puede obtenerse directamente gracias a la
teledetección o mediante la integración de ésta
con datos provenientes de otras fuentes. Esto puede conseguirse en
particular en el marco de modelos complejos tales como los que se
utilizan para el Índice Regional de Degradación, que
sirve para estimar los riesgos de erosión hídrica y
salinización a escala mediterránea. El
requisito necesario para los Indicadores Regionales es que puedan ser
utilizados para cubrir completamente el conjunto de la cuenca
mediterránea, ofreciendo una visión general a gran escala
que permita identificar las áreas en las que se deberían
realizar estudios más detallados. También deberían
tener el potencial de ser actualizados regularmente para efectuar
seguimientos. Ello implica que, a esta escala, la única
opción realista es el uso de sistemas de teledetección de
baja resolución y alta frecuencia de revisita tales como
NOAA-AVHRR (resolución de 1 a 8 km), SPOT VEGETATION (1 km),
TERRA-MODIS (0,25 a 1 km) o MERIS (0,3 a 1 km). Comparado con otros
sistemas, NOAA-AVHRR presenta ciertas deficiencias en la
precisión radiométrica y geométrica, pero a pesar
de ello sigue siendo un elemento central en el desarrollo de
indicadores y en la comprensión de los procesos de
desertificación. Esto es debido a que es el único sistema
que acumula 20 años de historia operativa, con lo que se ha
convertido en un elemento crucial para establecer análisis y
referencias multitemporales a largo plazo. Sin embargo los sistemas
más recientes garantizan la continuidad de los datos
recolectados por el satélite NOAA y permitirán con toda
seguridad mejorar la georreferenciación de la información
terrestre, así como extender las posibilidades de
obtención de información acerca del estado de la
vegetación y del suelo. Respecto a
la validación y la calibración de los indicadores
regionales, la teledetección encierra un gran potencial para
pasar de la escala regional a la escala de áreas piloto. Para
ello se desagregará la información relacionada con la
cobertura vegetal gracias a los datos de mayor resolución
proporcionados por sistemas tales como el Landsat-TM
(teledetección) o CORINE land cover (datos temáticos). En
particular, el trabajo que ha consistido en obtener información
fraccionaria sobre la cobertura vegetal a diferentes escalas
basándose en el Análisis de Composición Espectral
(ACE) ha mostrado que la cobertura vegetal posee una dimensión
fractal que permite que sea comparable a diferentes escalas. Aunque los
factores dominantes (p. ej. el control de los patrones de
vegetación) cambian en función de la escala, la
lógica científica que subyace a la comparación
podría provenir de la aplicación de conceptos de
resiliencia del ecosistema durante periodos de tiempo determinados,
fundamentándose en los datos de satélite de baja y alta
resolución disponibles para las áreas piloto DESERTLINKS.
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